miércoles, 6 de junio de 2012

NACIONAL SINDICALISMO – A LOS COMERCIANTES, INDUSTRIALES Y LABRADORES DE ESPAÑA


  De vosotros depende, como de todos los españoles, que podamos vivir en una España grande y rica. ¿Sabéis cómo? Formando parte de los Sindicatos de Empresarios Nacionalsindicalistas afectos a Falange Española de las J.O.N.S.

  Nuestra organización, una de cuyas bases han sido los Sindicatos obreros, quiere que los comerciantes, industriales y labradores, ingresando en los de Empresarios, demuestren que a ellos también les indigna que España sea campo abierto para toda clase de experiencias destructivas, zona neutral donde se puede hacer todo contra España misma, terreno de lucha para que los, partidos se injurien y las clases se despedacen sin que el Estado se sienta guardián vigoroso de la existencia nacional. Tenéis que demostrar también que sois de los que verdaderamente trabajan por el bien de todos, viviendo de un modo duro, mientras tantos señoritos ociosos y tantos haraganes se llaman a ¡aparte del botín español. Tenéis que mostrar cómo siempre estáis pendientes del afanoso sector de las transacciones y cuando lográis, a fuerza de trabajos y afanes, un modo de vida, una gran parte de vuestros productos va a manos de los usureros que os esquilman o de los bancos que sostienen su lujo con vuestra miseria.

  Cooperando a que se obligue a todos los españoles a ser productores, bien porque trabajen en sus respectivas profesiones, bien porque mediante sus trabajos den ocupación a otros hombres, hacéis que los obreros adquieran el convencimiento de que ambos tendréis intereses comunes que defender. Es necesario que demostréis al obrero que durante los dos años de Gobierno socialista ha aumentado la deuda pública, con tipo de interés más alto que nunca y libre de impuestos (es decir, aumentaron el número de rentistas, que viven del cupón sin trabajar); favorecieron a los bancos y grandes empresas y, en cambio, aumentaron las contribuciones a los comerciantes e industriales; así, el transporte mecánico padeció dos elevaciones y sufrieron aumento en el coste de la gasolina y lubrificantes y sufrieron aumento en los impuestos, incluso en los de rodaje; a la agricultura la desequilibraron, llevando a la ruina a los que verdaderamente pueden producir riqueza y trabajo.

  Cuando aportéis el esfuerzo y la disciplina al movimiento nacionalsindicalista tendréis la gloriosa sorpresa de descubrir vuestra fuerza. La unión y la acción. Entonces seguiréis hasta el fin para gritar con los demás Sindicatos hermanos: ¡Basta de política! ¡Basta de partidos! Queremos un Estado español genuinamente nuestro, nacido de nuestros Sindicatos. No necesitamos una casta de políticos que se interponga entre nosotros y el Estado.

  Unidos todos en nuestra tarea, sin políticos, sin mediadores, podremos hacer otra vez una España de todos, fuerte, respetada y rica. 

¡Arriba España!

José Antonio Primo de Rivera - La Nación, 29 de noviembre de 1934.